top of page

XIII Congreso de la Asociación Latinoamericana de Especialistas en Pequeños Rumiantes y Camélidos Sudamericanos
 

“Latinoamérica unida por una ganadería altoandina sostenible”
 

Del 25 al 27 de septiembre del 2024, Ayacucho-Huamanga-Perú

WhatsApp Image 2018-10-19 at 18.10.53.jp

Contexto actual de la crianza de camélidos sudamericanos en Perú

​

 

El Perú es el principal productor de camélidos sudamericanos del mundo con más de 5 millones de cabezas entre cuatro especies (llama, alpaca, vicuña y guanaco), de las cuales 3.596.753 son alpacas y representan más del 85% de las existentes en el mundo.

 

De estas cuatro especies, la llama y la alpaca son especies domésticas, mientras que el guanaco y la vicuña son especies silvestres.

 

La crianza de camélidos constituye una de las actividades productivas y económicas más importantes que se desarrolla en la zona altoandina peruana, y de ella dependen entre el 70 % al 80 % del ingreso familiar anual (de acuerdo a la FAO), siendo una actividad de agricultura familiar, la cual es prioridad para el Estado.

 

Alpacas: El Perú cuenta con la mayor población mundial de alpacas (87% de ejemplares), superando los 4.3 millones de alpacas, entre ejemplares de la raza Suri y Huacaya.

 

La crianza de alpacas es la principal actividad pecuaria desarrollada en las zonas altoandinas, por encima de los 4,000 m.s.n.m., representando el 80 % de los ingresos económicos de 82,459 productores alpaqueros, principalmente situados en  Puno, Arequipa, Cusco, Huancavelica, Ayacucho, Pasco, Apurímac, Junín, Tacna, Moquegua y Lima (sierra).

 

Del mismo modo, los pequeños criadores perciben el 50% de sus ingresos de la venta de fibra, así como el 45% de la venta de carne y el 5% de reproductores y otros. Durante el 2020, la producción nacional de fibra alcanzó unas 4,352 toneladas y de carne alrededor de 12,363 toneladas (SIEA, 2020).
 

También la carne de alpaca es un alimento valioso por sus altas bondades nutricionales, por contener el 24% de proteína y su bajo nivel de grasa (1.8%), en comparación con otras especies pecuarias. El consumo per cápita de carne de alpaca alcanza los 0.39 kg/hab/año y de llama de 0.12 kg/hab/año. 
 

La crianza de alpacas, además, de producir una de las fibras más finas del mundo se desarrolla en armonía con el medio ambiente haciendo sostenible el ecosistema altoandino. Esto debido a que contribuye a la conservación de las pasturas naturales y garantiza el abastecimiento de agua para valles altoandinos. Asimismo, con la fibra se pueden confeccionar prendas ecoamigables con más de 23 tonos de colores naturales.

 

Cada primero de agosto se celebra el “Día Nacional de la Alpaca”, con el objetivo de revalorar su crianza, su riqueza genética que contribuye a la economía familiar del poblador andino, y el aporte que representa a la seguridad alimentaria y nutricional, la diversidad cultural para el ecoturismo y tecnologías generadas que en ella envuelven y, de esta manera, estimular el consumo de sus productos y subproductos.

 

Llama: La población de llamas en Perú se estima en 1.257.000 cabezas, distribuidas desde Áncash en el Norte, hasta el Departamento de Puno en el sur. Los principales departamentos productores son Puno (35%), Cusco (18%), Huancavelica (11%), Ayacucho (9.5%) y Arequipa (9.3%), que agrupan a alrededor de 45.000 criadores de este camélido.

Existen dos variedades de Llamas: la pelada o K’ara, que se caracteriza por haber desarrollado poca fibra en el cuerpo, careciendo de fibra en la cara y piernas, y su grosor va de 32 a 35 micras). Se estima que el 70% de las llamas se ubican en esta variedad. Estos Camelidos son muy fuertes y se utilizan principalmente para el transporte de carga.

La otra variedad de llama es la lanuda o Chak’u, que muestra mayor cantidad de fibra en el cuerpo, con un vellón denso compuesto por fibras finas de 28 micras de grosor y de mayor longitud, llegando hasta los 21 centímetros de largo.

La leche de llama, como sucede con la leche de los camellos y dromedarios que pertenecen a la misma familia de mamíferos, ayuda a controlar los niveles de glucosa en la sangre, por lo que su consumo es beneficioso para las personas diabéticas.

Junto con la leche, la llama produce buena calidad de carne y fibra. Sobre la carne se resalta que posee 25 % de proteínas, tiene mejor sabor que la de alpaca, registra baja concentración de grasa y de colesterol, por lo que es recomendada para una alimentación saludable y para personas con problemas cardiovasculares. Por ello su aprovechamiento se da desde tiempos ancestrales.

 

Vicuña: El Perú tiene la mayor población mundial y de Sudamérica de vicuñas (Vicugna vicugna vicugna) con un aproximado de 218,000 ejemplares, informa el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego.

 La vicuña es un camélido silvestre sudamericano que habita en las zonas altoandinas de Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú. En el Perú los departamentos con mayor número de ejemplares de esta especie se encuentran en Ayacucho, Arequipa, Cusco y Puno.

 

Durante los meses de mayo a noviembre que coincide con la temporada seca se realiza el denominado chaccu, donde los titulares de manejo aprovechan de manera sostenible su fibra. 

 

A través de las Declaraciones de Manejo, las comunidades tienen permiso de aprovechar la fibra de manera sostenible y a la vez se comprometen a preservar a la vicuña y su hábitat.

 

La vicuña es una especie estacional que solo tiene una cría al año y es en la temporada de lluvia donde hay mejores pastos que garantiza que la cría sobreviva.

 

Cada 15 de noviembre fue establecido como el “Día Nacional de la Vicuña” con el fin de promover la valoración de la especie y la necesidad de protegerla contra la caza furtiva y el tráfico ilegal de su fibra que constituyen sus mayores amenazas.

 

Guanaco: Según datos del Consejo Nacional de Camélidos Sudamericanos (Conacs), la población de guanacos en Perú se estima en 3.810 ejemplares de guanaco, distribuidos en los departamentos Ayacucho (30.63 %), Arequipa (29.5 %), La Libertad (14.12 %), Ayacucho (30.63 %), Huancavelica (5.54 %).

La población de guanaco se encuentra dispersa a lo largo de los andes sudamericanos, desde la Reserva Nacional de Calipuy en el Perú, hasta la tierra del fuego en Chile. En el Perú, según observaciones y evaluaciones poblacionales efectuadas en los últimos años, se encuentran poblaciones importantes al sur del departamento de Ayacucho y en la sierra de la región Ica, lo cual podría sugerir una mejora en la recuperación poblacional de la especie que se encuentra amenazada principalmente por la caza furtiva y la degradación de su hábitat. (Fuente: Andina)

​

Situación actual y perspectivas de la actividad caprina en el Perú. 

​

La crianza caprina es una actividad pecuaria que se desarrolla en todas partes del mundo, siendo Asia y África los que concentran en mayor porcentaje del caprino mundial. Seguido de América, Europa y Oceanía. En los últimos años la evolución poblacional del ganado caprino en Latinoamérica ha sido positivo (FAOSTAT, 2019).

La introducción de cabras de razas europeas en el Perú se evidencia por el siglo XV, que dada por muchas generaciones de adaptación en condiciones de Perú han dado lugar a cabras de genotipo “criollas” (Cordero, 2003). Se reportan que el 80% de ganado caprino en el Perú son criollo, siendo los restos caprinos cruzados, resultado de la introducción de razas especializadas en la década de los 1950 (Arroyo, 1998).

Según el Sistema Integrado de Estadísticas Agrarias (SIEA) - 2022, el Perú alberga alrededor de 1, 774, 523 cabezas de ganado caprinos, de las cuales el 68% se encuentran en la sierra, 31% en la costa y el resto en la selva. La región Ayacucho alberga el 7.79% de la población nacional, convirtiéndose la tercera región con mayor cantidad de ganado caprino, seguido de Piura y Huancavelica.

La actividad caprina juega un rol muy importante en la pequeña agricultura familiar del país, convirtiéndose como una estrategia de vida para los productores, por sus atributos de fácil adaptación a zonas hostiles y la alta eficiencia en el uso de recursos alimenticios; así mismo, productos que derivan del caprino aporta un alto potencial de valores nutricionales garantizando la seguridad alimentaria de muchas familias, principalmente de zonas rurales. Sin embargo, es importante mejorar el proceso productivo para maximizar su producción, así mismo mejorar la cadena productiva corta de sus derivados, lo cual estaría relacionado al débil organizacional de los actores directos del sector.

En el Perú existe una heterogeneidad de sistemas de producción del ganado caprinos, que en su mayoría desarrollan de manera extensiva, poco tecnificada, siendo las praderas naturales, como los bosques secos tropicales, matorrales y subproductos de cosecha son las fuentes principales de alimentación. Una adecuada gestión sanitaria en los rebaños es poco practicada. Existen deficiente gestión de reproducción y del material genético, puesto que el uso indiscriminado de los recursos zoo genéticos involucra la disminución de parámetros productivos, así mismo peligra la extinción de la diversidad genética de los caprinos criollos.

La especie caprina en el Perú es poco valorada, a comparación de otras especies, resultando los productores los más afectados en el sector. Un adecuado diseño de los programas de alimentación, sanitario, reproducción y buenas instalaciones es esencial para garantizar la rentabilidad del sector, según cada modelo productivo y las diferentes realidades. Es importante que los gobiernos locales y nacionales consideren la actividad caprina en los planes del desarrollo agrario como una especie de prioridad que permita alcanzar un alto impacto económico en la población y el país.

Flayer 1 Aleprycs Perú.jpg
bottom of page